¿Saben?, lo que más disfruto durante la sesión de fotos, es verlas disfrutar de toda la experiencia que integra la sesión de fotos; desde la ropa que usarán, llegar el día de la sesión para el maquillaje y peinado y por supuesto la sesión de fotos.
Hace unas semanas convencimos a mi abuelita a que se hiciera una sesión de fotos, tengo que mencionar que realmente pensé que no aceptaría, ya que siempre la vi como mi abuelita seria, conservadora, no recuerdo haberla visto algún día con maquillaje o usando falda/vestido; así que cuando mi mamá me comentó que si había aceptado (porque ella tuvo la encomienda de convencer a mi abuelita), me dio mucho gusto.
Y más gusto me dio que ella venía con toda la actitud y abierta a lo que le propusiera, muuuuy cooperativa de inicio a fin; con el maquillaje (le pedí a la maquillista que se lo hiciera muy natural, para que no sintiera el cambio tan drástico y se sintiera incómoda durante toda la sesión); le pedí que trajera ropa que le gustara y se sintiera cómoda; para esto mi mamá aprovechó el viaje y se vino preparada para tomarse unas fotos con mi abuelita, y trajo ropa y entre la ropa venía un vestido, que cuando lo vi se me antojó para que mi abuelita lo usara, y para mi sorpresa cuando le pedimos que si se lo ponía, dijo que si, lo tomó y se fué a cambiar.
Me encantó verla disfrutar SU día, porque eso es la sesión de fotos, una experiencia especial para quien la toma.